Canes probaron recordar una indicación poco trascendente tras un tiempo determinado.
Los perros tienen memoria episódica, es decir, ante un estímulo externo son capaces de recordar un evento ligado a un tiempo y un lugar específico. Así lo sugiere un estudio publicado en la revista Current Biology, realizado por un equipo de investigadores de Hungría liderado por Claudia Fugazza.
Esto explicaría la razón por la que tu mascota puede intuir que le vas a dar comida cuando te sientas a la mesa a pesar de que le has indicado explícitamente que se retire. Para probar que los perros tienen este tipo de memoria los etólogos hicieron una serie de experimentos derivados de la técnica “Haz como yo hago”, los cuales aluden a la capacidad de los canes de imitar a sus humanos.
Primero se les enseñó a tocar un paraguas, tal como lo hacían sus dueños. Luego, fueron entrenados para echarse en el piso, independientemente de la acción anterior, dándoles a entender que la imitación no era un truco relevante. Luego de un tiempo determinado, se les presentó el estímulo que les indicaba realizar la imitación. Los animales fueron evaluados en dos periodos: luego de un minuto, y luego de una hora. Fueron capaces de recordar el primer truco, pero su rendimiento decreció cuanto más tiempo pasó. Fueron evaluados 17 perros de diversas razas puras y mezcladas.
También son celosos
Además de recordar eventos específicos de un espacio y lugar, los perros también experimentan celos. Esta fue la conclusión de la profesora Christine Harris de la Universidad de California al estudiar a 36 canes. Se evaluó la actitud de los animales en tres escenarios: cuando sus dueños los ignoraban, cuando jugaban con un libro de niños y cuando jugaban con un peluche de perro que ladraba y movía la cola.
En el primer y el segundo caso, los animales no mostraron mucho interés en lo que sus humanos realizaban, a diferencia del tercer caso. Cuando vieron a sus dueños jugar con el peluche que se parecía a ellos, un cuarto de los canes gruñeron y se interpusieron entre el juguete y los humanos. Esto solo pasó con un perro en el experimento que involucraba a los libros de niños.
Según la autora, la reacción de los perros puede indicar una forma simple de celos que surge a partir de la falta de atención hacia ellos y por el cariño expresado hacia un rival. La investigación contó con la participación d 14 razas de perros, tales como salchichas, chihuahuas, pomerianos y Yorkshire terriers, además de razas mixtas.
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